Santa Cruz, Bolivia – 31 de julio de 2024 – La Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) ha declarado una situación de emergencia debido a la creciente crisis de carburantes y la escasez de divisas en Bolivia, factores que están poniendo en grave riesgo el abastecimiento de alimentos en el país. Representantes de la CAO, liderados por José Luis Farah, advirtieron en una conferencia de prensa que la falta de combustible y el aumento en los costos de insumos y materias primas, agravados por la escasez de dólares, están afectando severamente la producción agrícola.
La situación ha llevado al sector transporte a adoptar medidas de protesta, con el transporte pesado nacional e internacional activando un paro y bloqueo indefinido de carreteras en todo el país. Esta acción está destinada a presionar al gobierno para que tome medidas urgentes y efectivas.
Los productores han alertado que la falta de soluciones podría resultar en el cierre de unidades productivas, lo que empeoraría la ya precaria situación de abastecimiento de alimentos en el país. La Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) informó una drástica reducción en la cosecha de granos debido a la sequía y la falta de insumos, estimando que la producción de girasol caerá un 60% este año.
Además, en la localidad de San Julián, los productores han iniciado bloqueos de caminos en demanda de la legalización de semillas transgénicas, argumentando que las condiciones climáticas adversas y la falta de tecnología adecuada están afectando gravemente sus cultivos.
La crisis actual, exacerbada por la falta de acciones efectivas por parte del gobierno, podría tener consecuencias devastadoras para la seguridad alimentaria de Bolivia, con un impacto negativo en el crecimiento y desarrollo económico del país. Los productores hacen un llamado urgente a las autoridades para que tomen medidas inmediatas y eviten un colapso en la cadena de abastecimiento de alimentos.
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